Luego de que la Cámara de Diputados le retiró el fuero constitucional el 11 de agosto, a consecuencia de una denuncia de la Fiscalía General de Justicia capitalina (FGJ) por enriquecimiento ilícito, entre otros delitos, Mauricio Alonso Toledo Gutiérrez huyó a Chile, en donde ahora pretende que las autoridades de aquel país lo declaren perseguido político, para eludir la extradición a México y así evitar enfrentar los cargos que pesan sobre él.
Los abogados de quien fuera delegado en Coyoacán se presentaron ante la Dirección de Asuntos Internacionales de la Corte Suprema de Chile y afirmaron que Toledo insiste que es “víctima de persecución política por lo que, ante una eventual solicitud de extradición, la justicia chilena podría negarla”.
A consecuencia de que se le retiró la inmunidad constitucional, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación determinó la semana pasada que Toledo no puede tomar protesta como diputado, puesto por el que había ganado por reelección, postulado por el Partido del Trabajo (PT), por lo que será su suplente, Jaime Valtierra, quien asuma el cargo de diputado federal por el distrito de San Martín Texmelucan, por que él sí cumple los requisitos de elegibilidad.
Queriendo aprovechar el hecho de que según los términos del acuerdo entre México y Chile, la extradición no podrá ser concedida por delitos considerados como políticos ni en el caso de que el país requerido tenga motivos para suponer que la solicitud motivada por un delito común ha sido presentada con la finalidad de perseguir a un individuo a causa de opiniones políticas, Toledo se presentó ante la Corte chilena “para ponerse a disposición de la justicia ante cualquier requerimiento y para informar sobre su domicilio actual”.
“Nuestro representado… ha sido víctima de persecución política en su país, por lo que hemos ratificado ante el máximo tribunal su entera disposición para colaborar con la justicia y esclarecer los hechos”, señaló la defensa del legislador sin fuero.